Nosotros

 

 

Transformamos y realzamos la belleza de sus uñas en manos y pies, para una apariencia de impacto. Somos expertos en estilo.

Nuestros servicios ofrecen  maquillaje permanente, venta de lociones para manos y pies, esmaltes, bases, cera, uñas postizas, tratamientos para el crecimiento de las uñas, tratamiento antimanchas y antiarrugas para manos, y mucho más.

Contamos con un equipo de profesionales especializados en diferentes técnicas del arte del cuidado y decoración de uñas, cualificados para brindarle asesoramiento estético y emplear las mejores técnicas, para lograr excelentes resultados y lograr su completa satisfacción.

Conozca más sobre nuestros tratamientos y productos en nuestro sitio web y no dude en contactarnos, para poder ofrecerle un servicio personalizado. Estaremos complacidos de realzar la belleza de sus uñas.

 

 

Preguntas frecuentes:

QUE TIPO DE CABELLO TENGO?

 podemos ofrecerle lo último en productos cosméticos y tratamientos para uñas de manos y pies,entre otros productos, con una preparación y técnica precisas y a precios inmejorables. Contáctenos y conozca los productos que tenemos...

EL CABELLO 

La importancia de un cabello sano y brillante

 

Cuidar y nutrir nuestro cabello cada día es un tema tan fundamental como seguir unos buenos hábitos de maquillaje y cuidado corporal: forma parte de nuestra seña de belleza personal. Para estar guapa, tú cabello necesita toda tu atención y tus cuidados diariamente. Como en Perfume’s Club nuestro objetivo principal es proporcionarte las mejores herramientas para que estés perfecta, vamos a detallarte aquellos puntos imprescindibles que debes conocer sobre tu cabello.

 

Para ello primero tendrás que ir a la raíz de tu problema, y empezar por detectar cuál es tu tipo de cabello y cómo puedes tratar tu cuero cabelludo. Siguiendo nuestros consejos sabrás de primera mano qué productos te benefician más, así como cuál es el mejor momento para aplicar tu mascarilla, reparador o serum de cabello, cómo puedes utilizar tu plancha de pelo de la forma más eficiente, etc.

 

Conoce mejor tu tipo de cuero cabelludo y cabello para lograr tu mejor look

 

Lo más importante a la hora de proceder con tu rutina diaria de cuidado capilares es conocer bien las características que presenta tu cuero cabelludo, y cómo tratarlo. La glándula sebácea (encargada de segregar la lubricación natural de tu cabello) juega un papel muy importante en la determinación del tipo de cabello y cuero cabelludo. No todos tenemos la misma segregación de sebo y existen varios factores como la alimentación o el estrés que pueden influir en ello. Por tanto, los tipos de cuero cabelludo generales que hay son:

 

Cuero cabelludo graso: presenta unas glándulas sebáceas hiperactivas, produciendo sebo en exceso y dándole al cabello un aspecto lacio y apagado. Esto puede deberse a los cambios hormonales (a menudo frecuentes durante la pubertad o la menopausia) o al estrés. La gente que tiene un cuero cabelludo graso, también posee un cabello graso. El tipo de cabello habitual con estas características es el cabello claro, que es mucho más fino que el oscuro y por tanto más susceptible de exceso de grasa. Los cabellos grasos necesitarán una limpieza frecuente pero no diaria, ya que si lo lavamos demasiado acabaríamos provocando mayor producción de sebo como respuesta natural de nuestro cuerpo. Necesitarás champús que no contengan aceites, que tengan propiedades astringentes y su detergente sea suave. El lavado en seco será tu mejor opción, y es mejor no utilizar demasiado las mascarillas. En caso necesario, solo aplícala en las puntas. 

Cuero cabelludo seco: este tipo de cabello presenta un aspecto apagado y sin vida, también es más susceptible al quiebre. La causa más evidente de esta sequedad es la deshidratación del cuero cabelludo; la retención del agua es escasa y también la producción de sebo. Necesitarás champús con propiedades humectantes, y si contienen aceites vegetales que te ayuden a la hidratación natural del cuero cabelludo, mejor. No debes lavarlo con frecuencia, pero si es bueno hidratarlo asiduamente, aplicando la mascarilla o serum adecuado y humedeciéndolo un poco sin aclarar. 

Cuero cabelludo mixto: este tipo se sitúa entre el seco y el graso, y se produce cuando las glándulas sebáceas presentan hiperactividad en la raíz pero no llegan a ser tanto como para imbuir todo el pelo, así que las puntas son secas y quebradizas. En este caso necesitarás el mismo champú que un tipo de cabello graso, centrándolos solo en el cuero cabelludo y evitando lavar las puntas. Después trataremos las puntas en seco, con un hidratante o serum reparador.

Cuero cabelludo normal: es el tipo más equilibrado. Es brillante y dócil, y es el resultado de un estilo de vida equilibrado y saludable en combinación con la utilización de productos específicos para cada una de las atenciones que pueda necesitar el cabello. 

 

Una vez que sepas a cuál de estos tipos de cuero cabelludo perteneces, es importante que conozcas mejor los tipos de cabellos qué hay para saber cuidar el tuyo mejor. Los diferentes tipos de cabellos son:

 

Cabello grueso: lo que define a este tipo de cabello es que tienen la hebra gruesa. Es el tipo de cabello más resistente y soporta mejor el desgaste, los peinados o los tintes. Sin embargo, está probado científicamente que a este tipo de pelo le cuesta asimilar más la humedad que a otros tipos, y por tanto puede dar lugar a un exceso de volumen y frizz.

Cabello fino: este es todo lo contrario al grueso, la hebra es fina y carece de volumen y fuerza. Necesitarás productos específicos para este tipo de cabello, que suelen contener ingredientes más suaves y menos agresivos. Cada vez que lo laves es bueno que utilices un buen acondicionador que nutra tu cabello, así como aplicar una mascarilla en las puntas una vez por semana. 

Cabello liso: la hebra de este tipo de pelo esta entre el tipo grueso y el fino, por lo tanto es equilibrado. Sin embargo presenta diversas problemáticas frecuentes: falta de volumen, de brillo, puntas abiertas y tendencia al encrespamiento ante la estática.  Para ello deberemos cuidarlo de la siguiente manera: lavarlo todos los días si es graso, y cada dos o tres días si es normal o seco. Nuestro champú ha de ser suave, bajo en detergente y humectante. Utiliza poco acondicionador y mascarillas que ayuden a mantenerlo liso, sin apelmazar, ni encrespar. 

Cabello rizado: es un tipo de cabello seco y con mucho volumen. También es denso y achatado. Las hebras toman formas muy onduladas y son finas y delicadas. A la hora de lavarlo deberemos hacerlo con suavidad y nutrirlo intensamente. La frecuencia con la que lo laves debe ser lo menos posible y utiliza siempre un acondicionador específico y rico en nutrientes. Utilizar mascarillas, serums o aceites vegetales en seco y a diario para mantenerlo hidratado, será mejor opción que el lavado frecuente.

Cabello ondulado: presenta hebras no tan rizadas como el tipo de cabello rizado y con trazos muchos más amplios. Por esta razón suele ser algo más grueso y no tan denso. Del mismo modo, también puede presentar características tanto de pelo graso como mixto. Debes utilizar el champú más adecuado para tu tipo de cuero cabelludo, y no lavarlo con demasiada frecuencia.

Cabello crespo: las hebras del cabello crespo son las más rizadas de entre todos los tipos de cabello ondulado. Es muy denso, fino y  tiene mucho volumen. Tiene un efecto visual como el de una fina nube que flota alrededor de nuestro rostro. Para este tipo de pelo deberás utilizar los productos más adecuados para el tipo de pelo seco, y seguir un cuidado especial en cuanto a su nutrición y tratamiento. Debes ser constante con su hidratación, lavarlo lo menos posible y exponerlo muy poco al secador (y si lo utilizas, aplica buenos protectores térmicos antes). Este pelo es el que necesita más cuidado, ya que se quiebra con facilidad y si no llevas un cuidado a consciencia, puede terminar cayéndose. 

 

¿Conoces todos los tipos de productos que pueden beneficiar a tu cabello?

 

Existen muchos tipos de productos que pueden beneficiar a tu pelo, y precisamente por esto debes tomar la mejor decisión para tu cuidado. En este sentido, os queremos ayudar mostrándoos en líneas generales de qué productos podéis disponer para tratar vuestro cabello y cuál es su mejor utilidad:

Existen diferentes tipos de champús: 

 

Champú neutro: sirve para todo tipo de cabello, no trata ningún problema en particular, simplemente quita la suciedad del cabello sin grandes modificaciones, respetando el pH natural de tu cuero cabelludo. Este tipo de champú es bueno para el cuero cabelludo normal que no necesite tratar ningún problema específico. 

Champú equilibrante: nivelan el pH del cuero cabelludo cuando el pelo está muy dañado. Es ideal para cabellos lisos u ondulados que hayan estado muchas horas al sol o soportando fuertes rachas de viento.

Champú hidratante: ayuda a que el pelo seco retenga la humedad, lo hacen más flexible y suave al tacto. Es el recomendado para cabello rizado o encrespado, fino y con tendencia a la sequedad.

Champú para cabello con color: buscan mantener por más tiempo el color del tinte en el cabello, respetando la pigmentación. Es un tipo muy específico para cuando nuestro cabello sea teñido. Debes tener muy en cuenta sus características y las de tu tinte para elegir aquel champú que más respete tu color y tu tipo de pelo.

Champú para aportar volumen: aporta volumen al cabello fino, seco y de aspecto apagado. 

Champú efecto lacio: es para cabellos con mucho frizz, ondulados y rebeldes. Sirve para hidratar el cuero cabelludo, cerrar cutículas y disminuir la estática.  También puede utilizarse en pelos lisos que quieran mantener su estado natural y evitar el apelmazado o encrespamiento habitual, que suele sufrir este tipo de pelo ante las agresiones externas.

Champú anticaspa: el champú por excelencia para aquellos con un cuero cabelludo graso y con exceso de sebo. Se deben utilizar como un tratamiento muy específico en caso de presentar este problema y deben ser tratados con delicadeza. En estos casos es mejor que pidas consejo a tu dermatólogo cuanto antes.

Acondicionadores: sirven para complementar al champú y presentan características más suaves y emolientes. Los tipos de acondicionadores son los mismos que los detallados para el champú y lo complementan. En algunos casos, como en el del cabello graso o mixto, o cabello normal con riesgo de exceso de sebo, no es aconsejable utilizar siempre el acondicionador cuando lavemos nuestro pelo. 

Las mascarillas se pueden englobar en tres tipos diferentes: ?Mascarillas rehidratantes o nutritivas: son tratamientos para cabellos secos que necesitan retener la humedad, estos productos además poseen vitaminas, proteínas de seda, lino, avena, etc.

Mascarilla estructural: son tratamientos progresivos que va nutriendo el pelo, sella las cutículas y protege de las agresiones externas. 

Mascarilla antiestrés: son para cabellos por abuso de tratamientos térmicos y químicos, este producto suaviza la cutícula del pelo, lo revitaliza y lo protege. 

 

También tenemos diversos tipos de fijadores que podremos utilizar en función de nuestro objetivo: 

 

Geles fijadores: se utilizan para mantener la cohesión entre los mechones de cabello. Le dan un brillo húmedo y no son pegajosos al tacto. Se pueden aplicar sobre cabellos secos o grasos. Puedes elegir el tipo de gel que más le convenga a tu tipo de cabello, ya que los hay humectantes, astringentes, neutros, etc.

Espumas: tienen un efecto muy similar al de los geles, forman una funda muy fina, trasparente, suave y flexible alrededor del cabello.

Lacas: se utilizan para fijar y dar forma a tu peinado. A la hora de aplicarla tienes que tener muy en cuenta que sea adecuada, se ajuste a tu tipo de cabello,  y el peinado que quieras lograr con ella. Las hay ligeras, de fijación fuerte y extra-fuerte. Su utilización varía en función del peinado que quieras lograr.

 

Secadores y planchas de pelo: estos hay que utilizarlos con moderación y si tienes el pelo seco o delicado es recomendable usarlo lo menos posible. En todos los casos es muy recomendable utilizarlos con un protector térmico para prevenirnos de la temperatura a la que se expone el cabello. 

Protectores térmicos: se deben de utilizar antes de usar la plancha o el secador. Crean una película protectora alrededor de tu pelo que lo protege del calor y las agresiones externas.  Los hay para cada tipo de cabello: con alcohol y bastante ligeros para pelos grasos y cabellos finos, con tratamiento hidratante y extra protector para cabellos secos o muy dañados, etc.

 

Como aplicar tus productos de peluquería

 

A veces no importa lo bueno que sea un producto, si no se aplica o distribuye correctamente los resultados no serán buenos, ya que este paso es el más importante a la hora de mantener nuestra rutina de cuidado diario. 

 

Los pasos generales que debes seguir son los siguientes:

Primeramente el champú: hay que tener en cuenta que el lavado no debe ser demasiado vigoroso, ya que cuando nuestro cabello está húmedo, pierde elasticidad y es más vulnerable a los lavados agresivos. Lava tu cabello en la medida en la que sea recomendable para tu cabello, por ejemplo: en pelos secos, encrespados, rizados o delicados se recomienda hacerlo una vez cada tres días. Por supuesto, debes utilizar el champú que más se adapte a tus características capilares.

Aplica el champú colocando una pequeña cantidad en las manos, frota y luego extiendes todo el producto por el pelo de forma uniforme. 

Proceder al lavado masajeando el cuero cabelludo, realizando movimientos circulares.

Aclararlo con agua tibia. 

 

 

Si aplicas el producto diariamente basta que lo apliques una vez. Si lo haces con menos frecuencia por tu tipo, puedes aclarar y volver a repetir el proceso para intensificar la limpieza. 

El acondicionador: el acondicionador ayuda a suavizar las cutículas del cabello y contrarresta la carga negativa excesiva del cabello, dejándolo con un buen aspecto y tacto suave. Después de lavar el pelo, mejor si lo secas un poco o esperas a que no esté tan mojado. 

Aplica el acondicionador recomendado para tu tipo en el pelo y no en el cuero cabelludo, distribuyendo el producto desde la  línea de contorno hasta la nuca. 

Dejar actuar durante 1 minuto para permitir que el producto actúe. Aclarar bien y pasar a secar suavemente. Después seguiría el estilizado del pelo si es el caso.

 

Aplicación de tratamientos en el cuero cabelludo: Partir el cabello a lo largo utilizando un peine fino.

Trabajar desde el centro hacia afuera, aplicándolo directamente sobre el cuero cabelludo.

Masajear con delicadeza realizando movimientos circulares.

Dejas actuar el tiempo recomendado, aplicar calor si es necesario.

Aclarar o dejar el producto dependiendo de sus características y las necesidades de nuestro pelo.

 

El tratamiento a base de serums o de tratamiento específico: Para aplicarlo debes haber lavado previamente el pelo con el producto recomendado para tu tipo.

Distribuye el tratamiento por todo el cabello de la forma más uniforme posible. Si tienes el cabello largo, aplícalo en las partes intermedias y en las puntas de tu pelo, evita la raíz. Si en cambio, tienes el pelo corto, es mejor que apliques el tratamiento solamente donde sea necesario.

Déjalo actuar el tiempo necesario, y si es preciso puede que también tengas que aplicar calor (el producto te lo indicará). 

Finalmente, en función de tu producto, aclarar bien o simplemente dejar que tu pelo lo absorba. 

 

 

Con esto tienes las pautas generales para aplicar tus productos de peluquería dentro de una rutina diaria de cuidado e higiene capilar. Es posible que necesites otros cuidados específicos en caso de tener problemas más singulares como seborrea o caída del cabello: en estos casos lo mejor será que acudas cuanto antes a tu dermatólogo y sigas las recomendaciones necesarias para tratar el asunto.

QUE MAQUILLAJE ES EL IDEAL?

El maquillaje ideal para tu belleza personal
 

En nuestra sociedad el maquillaje se ha convertido en algo más que la simple utilización de cosméticos faciales con la finalidad de mejorar el aspecto. También se ha establecido como un elemento indispensable para realzar la personalidad de las mujeres. Este nuevo sentido que tiene hoy el maquillaje femenino y las técnicas innovadoras que se han introducido, han permitido dar al rostro de la mujer un aspecto natural que se adapta a la edad y las circunstancias cutáneas de cada una. Y es que cuando se trata de embellecer tu rostro, debes tener siempre en cuenta qué tipo de piel tienes y cuál es el maquillaje que se adaptará mejor a ti en cada momento.  En coloresyestilo nos preocupamos mucho por la belleza, y por esta razón queremos mostraros cuál es la mejor y más eficaz forma de utilizar el maquillaje para que logres un rostro perfecto y expresivo. 

 

Además, cuando hayas conocido tu tipo de piel y estés decidiendo cuál es el maquillaje con el que deseas expresarte, en nuestra web dispones de gran variedad de maquillajes para ayudarte a elegir aquel te gusta más: compacto, fluido, en polvos… Diversidad de opciones de las mejores marcas, que te ayudarán mucho a decidirte.  La expresión de tu rostro, personal y única, será más sencilla de elegir con estos sencillos consejos con los que podrás lograr realzar tu belleza natural como nunca antes.

 
Maquillaje ideal para cada tipo de piel
 

Como no todas las pieles son las mismas, el maquillaje puede no ser adecuado para según qué tipo de pieles y en algunos casos incluso podría tener efectos adversos. Además tampoco es adecuado cualquier tipo de maquillaje para nuestro rostro. Por ejemplo: el maquillaje en crema puede no ser adecuado para todas las caras, y el maquillaje líquido no es recomendable utilizarlo en verano o cuando nos exponemos a temperaturas altas. Por ello os vamos a detallar que tipos de pieles hay y el maquillaje que mejor se adapta a cada uno:

Pieles normales: Es el tipo de piel más equilibrado, uniforme y casi no presenta imperfecciones. Podrás utilizar todo tipo de maquillajes: líquido, en crema, en polvo… ¡el que mejor se adapte a ti! 

Pieles secas: Las pieles secas son las que tienden a resecarse y a no retener bien los líquidos que la mantienen húmeda, o bien presentan una escasa segregación de grasas naturales. La clave para maquillarnos con este tipo de piel es sencilla: hidratar lo máximo posible. Para esto lo mejor serán maquillajes fluidos, líquidos y que contengan propiedades humectantes y emolientes. 

Pieles grasas: Son aquellas que tienen un exceso de grasa, sobre todo en zonas como la frente, la nariz y la barbilla. Son más gruesas y presentan mayor dilatación de los poros. Lo mejor es utilizar maquillajes compactos o polvos, evitando siempre aquellos que contengan algún tipo de aceite. Además si utilizamos una prebase nos ayudará bastante a matizar la grasa del rostro. 

Pieles mixtas: Las pieles mixtas son aquellas que presentan tanto características de las pieles grasas como de las secas. Presentan brillantez en algunas zonas como frente, nariz o barbilla, pero en otras partes del rostro pueden estar secas. En este caso vamos a optar por un tipo de maquillaje líquido, libre de aceites, y si además contienen algún tipo de factor hidratante mejor.

Pieles sensibles: Son pieles delicadas, se irritan o resecan con facilidad. Son propensas a presentar rojeces y acné, y hay que tener cuidado si eres alérgico a algún componente del maquillaje que vayas a utilizar. El maquillaje indicado para este tipo de pieles es el indicado específicamente, ya que no contiene elementos demasiado ásperos. El más recomendable para este tipo es el maquillaje ligero en crema, después de haber hidratado correctamente nuestro rostro. 

 

Es importante que acudas a tu dermatólogo para conocer de primera mano cual es el tu tipo de piel, y así evitar posibles reacciones adversas en la aplicación del maquillaje. 

 
Cómo aplicar tu maquillaje perfecto

 

Lo más importante del maquillaje es la forma en la que lo aplicas, y la clave del éxito está en saber cómo hacerlo, teniendo en cuenta que el orden en el que lo hagas podría alterar tus resultados o incluso perjudicar tu piel.

Lo primero que deberás hacer es realizar una limpieza a conciencia de tu cutis, exfoliándolo y limpiándolo con un jabón neutro que respete tu tipo de piel. 

A continuación debemos aplicar la crema hidratante que mejor se adapte a nuestro tipo de piel, y dejarla actuar durante unos diez minutos para que la piel pueda absorberla correctamente. 

A partir de aquí, si es el caso, podemos comenzar con un pre-corrector para aquellas zonas oscurecidas (como debajo de los ojos) o para esos días en los que necesitas mayor cobertura. Sino, simplemente aplicaremos el corrector con pequeños toques en las zonas donde necesitemos disimular o camuflar algo. 

Ahora es el momento de elegir una buena base de maquillaje adaptada y recomendada para nuestro tipo de piel y en función de las circunstancias (por ejemplo: si vamos a exponernos al sol, es mejor si tiene factor protector).  Siempre mejor si aplicamos la base con brocha o esponja para mayor extensión y uniformidad. 

El quinto paso es el más personal de cada una, ya que será cuando apliquemos polvos correctores para tapar brillos y resaltar y ocultar zonas de nuestro rostro, a nuestro gusto y criterio.

Si es de vuestro agrado, después de los polvos, podéis aplicar el colorete que más os favorezca para potenciar los pómulos. Aplicadlos en función de la forma de vuestra cara.

A continuación, despierta tu mirada aplicando aquella máscara de pestañas que más te favorezca a tu elección: rizar, alargar, reafirmar, etc.

Para los labios es importante exfoliarlos e hidratarlos antes de aplicar el color o brillo que deseemos. Siempre tendremos mejores resultados si lo aplicamos con pincel.

Por último, es muy recomendable aplicar un spray fijador para que asegurar la duración y eficacia de tu maquillaje.

 

¡Voilà! Con estos sencillos pasos generales podrás lograr resultados increíbles. Animaros a probar el maquillaje que más os defina, y potenciad siempre vuestra creatividad.

 
Composición general del maquillaje
Set de maquillaje 
 

¿Te has planteado alguna vez cuales son los ingredientes que dan la eficacia a un buen maquillaje? De forma general, podemos decir que la composición del maquillaje no ha cambiado demasiado desde el inicio de su fabricación industrial, pero si ha mejorado mucho su calidad para obtener mejores resultados respetando siempre la salud de nuestra piel.  

Polvos de maquillaje: se componen básicamente de talco (entre un 60% y un 80%) y almidón (ingrediente vegetal capaz de absorber el agua). También pueden contener extractos de minerales como el zinc  o el magnesio y polímeros orgánicos (evitan que los polvos se vuelvan compactos).  Por supuesto, también contienen antioxidantes para ayudar a su conservación y los pigmentos responsables de su coloración. Pueden contener también algún elemento perfumante, para corregir su olor o neutralizarlo.

Máscaras de pestañas: contienen polímeros, que proporcionan un revestimiento flexible, y evita que se corran los pigmentos de nuestro rímel.  También pueden contener siliconas para hacerlos impermeables. Además tenemos ceras para proporcionar mejor adhesión y sensación de engrosamiento en nuestras pestañas,  pigmentos responsables del color de la fórmula y, como no, conservantes para preservar más tiempo nuestra máscara. 

Sombra de ojos: se compone, en líneas generales, de caolín en polvo para proporcionar cobertura y opacidad al producto, pigmentos para darle color y conservantes que ayudan a preservar su eficacia y evitan su contaminación.

Barra de labios: principalmente están hechas de ceras/grasas, que son compuestos orgánicos que se solidifican a temperatura ambiente y son los que le dan esa textura cremosa. Aceites de origen vegetal, mineral o sintético para dar brillo, emoliencia o bien mejorar su textura. Tenemos también colorantes de diferentes tipos y pigmentación para lograr el color y matiz deseado. Por último, hay otros ingredientes que aportan otras propiedades como por ejemplo humectantes, protectoras, reparadoras, etc.

 

Con esto tenemos una idea general de los ingredientes que contiene nuestro maquillaje, que en la actualidad ha ido evolucionando y acercándose cada vez más a un objetivo claro y deseado por todas nosotras: naturalidad y frescura, respetando siempre nuestra piel.

 
Maquillaje para la ocasión
 

Está claro que el maquillaje es una parte muy importante de nuestra personalidad y nos aporta un toque especial y distintivo.  Por ello es importante saber elegir siempre lo mejor para cada momento social que vayamos a compartir. Desde Perfume’S Club queremos orientarte con unas pinceladas sobre los diferentes  tipos de looks que puedes lucir para estar radiante en cada situación:

Natural: el aspecto que luces para trabajar, salir con las amigas o simplemente recibir gente en casa. Para esta ocasión nuestros estilistas recomiendan un aspecto natural. Consiste en aplicarnos una base de nuestro tono o un poco más claro. A continuación, aplica un rubor mate sin resaltar demasiado, solo para reafirmar. Brillo sobre los labios, y una mascarilla reafirmante para tus pestañas. ¡Listo! El resultado será fresco y atractivo.

Elegante: si tienes que acudir a una entrevista de trabajo, una cena o una boda, este será el maquillaje por el que vas a apostar. Lo mejor es aplicar una base uno o dos tonos más claro que nuestro tono, y corrector de ojeras. Un toque de sombra de ojos blanco o marrón para nuestra mirada nos aportará sofisticación.  También puedes utilizar un delineador de ojos para darle más profundidad a tu mirada, así como un rímel que defina y alargue tus pestañas. Por último aplica colores vivos que resalten tus labios como el rojo o el rosado. 

Informal: este es el maquillaje que utilizas cuando vas a salir de fiesta, al cine,  o acudir a una cita. Aplica un fondo de maquillaje claro sobre la piel, y subraya la mirada con un delineador de tonos vivos como el azul el verde o el violeta. A continuación aplica una sombra de ojos del mismo tono que el delineador para darle más efecto. Por último con un brillo de labios trasparente sobre la boca conseguirás un efecto jugoso. Con este maquillaje estarás guapa a la par que deseable.

Sofisticado: este es un look parecido al elegante, ya que se puede aplicar a las mismas situaciones, pero con la diferencia de que para esta ocasión intentarás lograr un efecto diferente en tu rostro o tu mirada. Por ejemplo transformar tu expresión a una más madura y profunda o bien a una más jovial y alegre.  Puedes utilizar una sombra de ojos oscura para los parpados, y remarcar los ojos con lápiz negro para aportar madurez, en caso contrario utilizaremos tonos más claros como el marrón o el blanco. Utiliza la máscara de pestañas que más se adapte al efecto que quieras producir, y resalta tu mirada.  El resto del maquillaje debe ser neutro: un ligero rubor rosado o anaranjado sobre las mejillas, y brillo sobre los labios.

 

Con esto ya tienes todo lo que debes saber para lucir siempre tu lado más natural, hermoso y creativo. No dudéis, ¡confiad siempre en vuestro propio criterio y no tengáis miedo a ser originales!

 

QUE PERFUME ELEGIR?

Perfumes Mujer: Una simbiosis de aroma y frescura
 
En la actualidad el perfume se ha convertido en un complemento más para la mujer, una prenda que se encarga de dar el último toque a tu vestimenta dejando a la vez una sensación agradable y única en ti. El perfume es capaz de hacernos sentir únicas y dejar en los demás un aroma que nos haga inolvidables. Pero, ¿sabes ya cuál es el perfume de mujer que mejor va contigo?, ¿conoces los pasos claves para comprar tu perfume ideal? La variedad de perfumes es tan amplia y son tantos los aromas que podéis encontrar en el mercado que es por eso que en Perfume’s Club os queremos ayudar a encontrar vuestra fragancia perfecta, esa simbiosis entre aroma y frescura que os hará sentir únicas.
 
Antes de nada deberéis determinar si buscáis un edt (eau de toilette), un edp (eau de parfum) u otra intensidad que sea la que dé lugar a que vuestro perfume sea más duradero y por lo tanto se fije por más tiempo o menos en vuestra piel.
 
Si quieres un aroma para el día a día ligero y fresco los edt son los tuyos, si lo que buscas es impactar en el resto con una fragancia profunda opta por un eau de perfume. Sea cual sea tu elección, cualquier perfume agradable siempre es bienvenido al olfato y si este además cuenta con un lote de perfumería podrás combinarlo con otros productos de su línea como puede ser una loción corporal, desodorante u otros. ¡De esa forma su aroma estará por más tiempo contigo!
 
Notas olfativas
 
Perfumes hay de muchos tipos, pero ¿qué aromas o notas olfativas van mejor contigo? ¿cuáles son las preferidas entre las mujeres?
 
Todos los perfumes se crean a partir de unas esencias las cuales se encargarán de dictaminar si un perfume pertenece a una familia olfativa u otra.
 
Entre las principales familias olfativas encontramos los perfumes afrutados, florales, amaderados, cítricos, especiados, frescos con toques acuáticos, frescos naturales u orientales los cuales se encargarán de dar un aroma u otro a tu perfume. Entre las familias olfativas por las mujeres destacan los perfumes florales y afrutados. Además, debes saber que un perfume cuenta con tres fases, también conocidas como notas olfativas, desde el momento que lo aplicas en tu piel hasta el momento que este se desvanece. Estas son las notas de salida, las cuales son el primer contacto que el perfume tiene con tu piel una vez lo aplicas, las segundas notas son las notas de corazón que suelen durar hasta 6 horas y son las más importantes puesto que son las que dan al perfume su aroma más identificativo.
 
Por último encontramos las notas de fondo que son las responsables de dar al perfume su carácter e intensidad y son aquellas que dejan un aroma final en tu piel.
 
Si tienes claro qué tipo de fragancia va más contigo solo tienes que escoger tu perfume ideal dentro de estas familias y dejar tu huella allá donde vayas.
 
Dónde aplicar el perfume
 
Si quieres que tu perfume te acompañe durante mucho más tiempo es importante que apliques tu perfume del modo correcto y en las zonas adecuadas. Existen unos puntos clave donde aplicar tu perfume y estas zonas no son nada menos que aquellas donde mayor riego sanguíneo hay o bien donde también puedes notar tu pulso. Esto ocurre puesto que estas zonas son más calientes y da lugar a que el perfume se evapore más rápidamente. Las zonas donde una mujer debe aplicar el perfume son detrás de las orejas, cuello, escote, muñecas, codos e incluso detrás de las rodillas.
 
Características básicas del perfume
 
Debes saber que, a parte de la agradable sensación que te hace sentir un perfume cuando lo aplicas sobre tu piel, es muy importante elegir bien la intensidad de este si quieres que una fragancia tenga una durabilidad más o menos extensa sobre ti.
 
Dependerá de los aceites esenciales, alcohol y otros ingredientes que se utilicen que un perfume tenga una intensidad u otra. Entre los principales tipos de intensidades que existen para las fragancias de mujer encontramos las siguientes.
Extracto o Perfume
Eau de Perfume (EDP)
Eau de Toilette (EDT)
Eau de Cologne (EDC)
Colonia
Agua refrescante 
 
Harán de tu perfume algo distinto
 
El perfume es sin duda un elemento que nos ayuda a distinguirnos del resto capaz incluso de evocarnos al recuerdo con solo olerlo. 
 
Elige siempre el perfume que mejor vaya contigo y haz que este te caracterice. Te damos algunos consejos sobre cómo elegir el perfume que mejor va contigo.
El mejor momento para elegir nuevo perfume es por la mañana ya que es cuando mejor funciona nuestro olfato.
Elige perfume según tus necesidades. Dependerá de si buscas un perfume para diario, para momentos especiales o para la noche que te decantes por uno u otro.
El olfato aguanta un máximo de 3 perfumes por lo que piensa tres fragancias que quieras oler antes de hacerlo.
Prueba el perfume rociándolo en el aire o aplícalo en la zona de la muñeca pero nunca lo frotes.
Lo ideal es tener entre 3 o 4 perfumes para así poder variar según tu estado de ánimo y no cansarte de ellos. 
 
Por lo tanto si has seguido los pasos adecuados y tienes claro el perfume que quieres ya sea para ti o para regalar a tu mujer, madre o una amiga echa un vistazo a la gran variedad de perfumes de mujer que encontrarás en coloresyestilo y elige el que mejor vaya contigo entre la gran selección de marcas blancas. 
Porque un perfume es mucho más que una fragancia, es un complemento más que te viste en tu día a día.